El semanario Vegas Altas y la Serena publicaba en su edicion de ayer, sábado 14, esta entrevista al candidato de IU a la alcaldía de Don Benito, Manuel Díaz, que reproducimos integramente a continuación.
- Balance de la legislatura
Esta ha sido la legislatura de la crisis, como demuestran casi 4.000 parados en Don Benito, 120.000 en Extremadura y 4’5 millones en toda España. Una crisis que el gobierno está gestionando con criterios neoliberales, ignorando las necesidades de las clases trabajadoras, y legislando al dictado de la banca y los especuladores, o sea, recortando derechos sociales y laborales, privatizando bienes y servicios públicos, y subiendo los impuestos a los trabajadores. Y como alternativa, el PP ofrece el mismo programa neoliberal que el PSOE, pero en una versión todavía más dura y antisocial. Además, esta crisis económica también es una crisis política, porque una democracia en la que los ciudadanos cuentan menos que los mercados es una democracia débil y malherida.
- Principales propuestas de su grupo durante esta legislatura
IU no tuvo representación en el Ayuntamiento de Don Benito esta pasada legislatura, pero hemos estado muy activos en la calle, mano a mano con los movimientos sociales y los sindicatos. Por ejemplo, participamos en la iniciativa contra la posible reapertura de las minas de uranio de La Haba (un proyecto insano del que ni la Junta ni el Ayuntamiento han informado a la ciudadanía), estuvimos en la Huelga General del 29 de septiembre (contra una reforma laboral injusta, que hace pagar a los más humildes el coste de una crisis que han creado los más ricos), y hemos estado al lado de los trabajadores de Genplast o Carcesa (exigiendo soluciones justas a esas situaciones dramáticas a las que una mala gestión empresarial les ha empujado).
- Haga autocrítica de vuestra labor
IU ha tenido que dedicar muchas energías a su propia reorganización, después de unos resultados muy poco satisfactorios hace cuatro años. Teníamos que abrir espacio para nuevas personas y nuevas formas de pensar y actuar, y refundarnos como fuerza política, social y cultural. Afortunadamente, esa tarea de refundación está encarrilada y podemos presentarnos ante la ciudadanía como una organización renovada, fiel a sus sólidos principios de izquierda de siempre, pero con el paso encaminado bien firme hacia el futuro.
- Labor del gobierno
Mariano Gallego confunde a menudo los intereses del conjunto de la ciudadanía de Don Benito con los intereses específicos de las clases más pudientes. Y ante esas políticas antisociales del PP, difícilmente puede el PSOE hacer oposición, cuando está sosteniendo a un gobierno que recorta las pensiones y abarata el despido. Rajoy y Zapatero, Monago y Vara, Gallego y Quintana, son las dos caras de la misma moneda neoliberal. El PP y el PSOE se han pasado toda la legislatura tirándose de los pelos, pero al final ni uno ni otro tienen ni imaginación ni coraje para proponer soluciones innovadoras a esta crisis.
- Relaciones con los gobiernos regional y central
La ciudadanía dombenitense empieza a cansarse y a indignarse del juego político que mantienen PP y PSOE, subordinando la gestión municipal a sus estrategias electorales. Mariano Gallego gobierna Don Benito contra la Junta de Extremadura y Guillermo Fernández Vara gobierna la Junta de Extremadura contra Don Benito. Y los dombenitenses son sus rehenes en esta batalla. En IU pensamos que las instituciones deben actuar mirando por el bien de la ciudadanía, y no en provecho de los partidos políticos.
- Proyectos e ideas para la próxima legislatura
IU apuesta por una renovación sustancial del tejido productivo dombenitense, basada en la defensa de los derechos de los trabajadores y el apoyo real a los emprendedores, la innovación tecnológica y la sostenibilidad medioambiental. IU apuesta por el cooperativismo y por la pequeña y mediana empresa, comprometida con su entorno natural y social. Nuestra comarca tiene un potencial económico extraordinario (agro-ganadería, energías renovables, turismo...) que hay que poner al servicio de toda la sociedad, de forma solidaria y responsable, haciendo revertir sus beneficios a la sociedad en forma de buenos salarios para los trabajadores y de servicios públicos eficaces (sanidad, dependencia, educación, cultura, medio ambiente, integración, etc.) que lleguen a toda la población. Y, por supuesto, transparencia en las instituciones, honradez de los representantes políticos y fomento de la participación ciudadana, es decir, más democracia y mejor democracia, como siempre ha defendido la izquierda.
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